¿Tienes una tienda online y quieres vender tus productos y servicios a nivel internacional? Desde hace un buen tiempo los hábitos de consumo han cambiado y cada vez más el comercio electrónico constituye un alternativa de compra y venta de productos y servicios. Los internautas, por su parte, son más exigentes y tienen en cuenta muchos criterios a la hora de comprar en una tienda online, o simplemente «consumir» contenido en una web. En este sentido, ofrecer un sitio web traducido a varios idiomas es una verdadera ventaja que te ayudará a diferenciarte de la competencia.
Sin embargo, has de tener cuidado: una mala traducción, poco clara o errónea ahuyentará a tus clientes potenciales. Es por esto que acudir a una agencia de traducción o a un traductor profesional es casí que un imperativo para garantizar un contenido de calidad. Antes de lanzarte de cabeza a la traducción e-commerce o a la traducción de un sitio web , lee este artículo; te ayudará a evitar decepciones.
1) Determinar el contenido a traducir
No siempre es necesario traducir un sitio web en su totalidad.
Por lo general, es habitual traducir el catálogo de productos, el menú de navegación y las entradas del blog relevantes para el público.
Una vez identificados los diferentes contenidos a traducir, puedes exportarlos en diferentes formatos (XLM, XLIFF, HTML, CSV o XLS). No olvides extraer también los elementos visuales (gráficos, logotipos y banners) que contengan texto.
Recuerda exportar todo el contenido relevante:
- Mensajes de error;
- Botones y mensajes de acción;
- Formularios;
- Presentaciones de productos o clientes en PowerPoint
- Libros electrónicos.
Identificar claramente el contenido a traducir te permitirá traducir sólo lo esencial. Esto te ahorrará costes de traducción. Por ejemplo, algunos documentos, como las condiciones generales, deben localizarse. Del mismo modo, recuerda actualizar tu catálogo de productos, para no traducir las fichas de producto obsoletas.
2) Integrar las técnicas de SEO en el proceso de traducción
Hay que evitar a toda costa traducir literalmente el contenido. En efecto, muchas palabras clave no serán las mismas de un idioma a otro. Para definir qué palabras clave utilizar, es posible realizar una búsqueda de equivalencia de palabras clave por país utilizando herramientas como Google Adwords, Semrush, Ahrefs, Ubersuggest, etc . Puedes hacerlo tú mismo, pero lo mejor es contar con la ayuda de un experto en SEO.
Si utilizas un traductor autónomo, deberás enviarle una lista de palabras clave antes de que empiece a traducir.
Si utilizas una agencia especializada en traducción SEO, su equipo de traductores se encargarán de optimizar el contenido traducido para la adquisición de tráfico natural. En e-translation agency, proporcionamos traducciones exactas y precisas, en particular gracias a las herramientas CAT. Nunca utilizamos traducción automática y todos nuestros traductores son nativos del idioma al que traducen.
3) Crear un brief de traducción preciso
Un brief de traducción difiere de un brief de redacción estándar.
Los dos puntos esenciales que hay que transmitir a la agencia de traducción o al traductor son:
- Las palabras clave de tu estrategia de SEO;
- El tono editorial.
En cuanto al tono, no dudes en preguntar al traductor sobre la pertinencia del tono elegido en el país de destino. Te aconsejamos que des al traductor carta blanca para moderar el contenido o adaptarlo si se aleja demasiado de las costumbres y tradiciones locales. A esto lo llamamos transcreación
El brief de la traducción también debe detallar varios elementos:
- Descripción de la empresa;
- Las razones por las que quieres instalarse en este país;
- El público objetivo del sitio web;
- El estudio del consumidor tipo.
¿Por qué es necesario un brief para traducir? Simplemente para que los responsables de la traducción puedan adaptar el contenido traducido a tus expectativas sin apartarse del objetivo principal de atraer tráfico orgánico de calidad.
Por ejemplo, una traducción corporativa B2B para la industria se centrará en el uso de términos técnicos precisos para evitar el sinsentido. Por el contrario, una traducción para una marca ecológica se centrará en traducir los ganchos de venta y las promesas de marketing para que el mensaje sea tan atrayente en la lengua de destino como en la de origen.
4) Recurrir a profesionales
Mantener el sentido de tus «slogans» de marketing, implica en ocasiones tener que transformarlos; una traducción, aunque bien hecha, no es suficiente. Para ello, hay que recurrir a traductores profesionales nativos. Solo ellos pueden crear «slogans» que el nuevo público objetivo entienda. Si tus campañas se basan en hechos del día a día o en el humor, tu futuro público internacional puede no entender el contenido si la adaptación a su lengua no se ha hecho correctamente.
Traducción automática: el error que no hay que cometer
Una buena traducción tiene en cuenta el contexto, la historia de un idioma, los cambios de unidades de medida o de moneda, el vocabulario específico y la adaptación de las figuras retóricas. Una traducción automática palabra por palabra no tiene en cuenta esta complejidad.
No utilices un traductor automático para traducir tu contenido. Google Translate y sus homólogos nunca adaptarán figuras retóricas, juegos de palabras o vocabulario específicos. Obtendrás una mala traducción, lo que desprestigiará tu sitio web y alejará inmediatamente a tus visitantes.
Agencias de traducción y traductores autónomos
Para obtener una traducción de calidad, tienes dos opciones: agencias de traducción y traductores autónomos.
Si quieres una traducción óptima, rápida y con soporte SEO, debes recurrir a una agencia. Utilizan herramientas CAT (Computer Aided Translation) y te ofrecerán una traducción personalizada, precisa y apta para el SEO.
Si tienes un presupuesto menor para invertir, puedes recurrir a un traductor autónomo. La mayoría de ellos ofrecen traducciones de calidad profesional, pero ten cuidado con algunas personas trabajan como traductores sin estar cualificados. Además, los traductores autónomos suelen tener que ocuparse de varios encargos al mismo tiempo. Es muy probable que el tiempo de entrega de un traductor autónomo sea mayor que el de una agencia de traducción.
En conclusión, si quieres conservar la identidad de tu marca, llegar al público objetivo con el mensaje adecuado y garantizar la fiabilidad del contenido técnico, recurre a profesionales.